PANDEMIA COVID19: EL ROL CLAVE DE LA ENFERMERÍA EN LA ADMINISTRACIÓN Y GESTIÓN DE INSUMOS DE SALUD

La enfermera Claudia Carrasco, trabaja en el Hospital Dr. Gustavo Friecke de Viña del Mar desde 1998, donde durante 15 años fue parte del equipo de la UCI Pediátrica; hasta  que se le presentó una nueva oportunidad laboral: ingresar a la Unidad de Abastecimiento, como encargada del área.

 

No fue fácil asumir el nuevo desafío, ya que su trabajo en clínica, le entregó herramientas que para su nuevo rol, parecían distantes. Sin embargo, su experiencia anterior la ayudó a visualizar y adelantarse a los problemas, a buscar una solución creativa y eficaz; trabajar en equipo y apoyarse en el conocimiento  adquirido y práctico. “Desde mi ingreso a esta unidad, mi jefatura ha sabido potenciar y apoyar mis gestiones. Sin duda esto ha sido un apoyo para direccionar y crear un nuevo perfil en el área”, precisa.

 

¿Cuáles son las tareas que competen a una enfermera (o)?

Son muchas. Como el apoyo de almacenamiento y distribución de insumos a los servicios; y dar orientación y directrices en temas relacionados a insumos. En nuestra unidad existe un comité de insumos que se reúne mensualmente con representantes de distintas áreas hospitalarias, que tienen relación con parte del proceso de adquisición, uso y distribución de ellos.

 

¿Qué diferencia hay, en que una enfermera (o) asuma la responsabilidad de esta unidad, en relación a otros profesionales?

Es de particular importancia el rol de enfermería en el suministro y almacenaje de insumos, ya que un profesional de enfermería reúne un cúmulo de conocimientos y  habilidades prácticas  adquiridas y perfeccionadas, en el desempeño clínico que se conjugan con la incorporación de la gestión, organización, administración y manejo de personal. Es por esto que este cargo requiere de múltiples  habilidades  y cualidades personales que imprimen el sello distintivo de la enfermería. Por ejemplo, hemos establecido procesos de mejora y protocolos de trabajo que apoyan el desempeño de los ejecutivos, lo que se traduce en mayor eficiencia y satisfacción usuaria. También se han resguardado los principios de probidad, al limitar el contacto de los distribuidores con los servicios clínicos, ya que la centralización de entrega de muestras y evaluación se realiza a través de mi cargo. Se mantiene una glosa hospitalaria actualizada, basada en indicadores de calidad, confección de fichas de insumos y apoyo en la organización de la  capacitación de insumos nuevos. Se establece una priorización de “insumos urgentes”,  dando respuesta inmediata a estos requerimientos para garantizar el apoyo en las actividades clínicas. Hemos potenciado este cargo a nivel local, brindando apoyo en otros hospitales e instituciones.

 

En el contexto que estamos viviendo, pandemia Covid19 ¿Qué tipo de acciones marcan la diferencia entre una buena o mala gestión de insumos?

Sin duda que la diferencia la marca la buena distribución y administración de recursos. Para esto se requiere una matriz de priorización de necesidades donde se debe aunar y congeniar a los diferentes actores involucrados, interpretando y recibiendo sugerencias, buscando alternativas y determinando -según presupuesto-, lo que es urgente e irremplazable para combatir esta pandemia. Se debe manejar más de una alternativa, ya que ha sido frecuente el desabastecimiento desde las mismas empresas. Por esto es importante administrar una base de datos con insumos aprobados para poder contar con alternativas en caso de quiebre de stock.

 

¿Qué mensaje podría darle a otras enfermeras y enfermeros, sobre la importancia que tienen desempeñando este rol?

Sin duda es una visión distinta del rol tradicional de enfermería. Existen muchas falencias y desconocimiento de los insumos disponibles en el mercado;  como el uso correcto, alternativo y/u óptimo de muchos de ellos, lo que hace desaprovechar recursos. Es por eso que al conocimiento administrativo de la adquisición, almacenamiento y distribución de insumos, es necesario adherir una mirada de conocimiento profesional clínico y de gestión, que permita contribuir a la satisfacción de las necesidades de la salud pública. En ese contexto, el aporte que podemos entregar desde la enfermería, tiene toda la capacitación y experiencia para hacerlo.